Los 10.000 del Soplao (MTB)

Cabezon de la Sal
21 Mayo 2011

Progresa Adecuadamente. Necesita Mejorar.

Siempre me ha hecho un poco de gracia este tipo de calificaciones porque estando acostumbrado a las clásicas de Muy Deficiente, Insuficiente, Suficiente, Bien, Notable y Sobresaliente, las de PA y NM me parecían demasiado genéricas. Sin embargo a lo mejor vienen bien para calificar mi actuación en El Soplao este año.

La verdad es que estoy contento. Van ya cuatro participaciones consecutivas en el Soplao de Montaña y en cada una de ellas he conseguido mejorar los tiempos, si bien los objetivos cada año iban siendo más ambiciosos.

Al Soplao le llaman "El infierno del norte" y son 165km de distancia con 4700m de desnivel acumulado. Los primeros, que suelen ser ex-profesionales o incluso pros en activo, lo suelen acabar en menos de 7 horas, y los últimos, los más sufridores, al menos en tiempo, lo terminan de noche y alrededor de 16 horas. Mas del doble.

 En el 2008 el objetivo era terminar de día y lo conseguí fácilmente, en el 2009 bajar de las 10h y también lo conseguí, en el 2010 había que bajar de las 9h y me quedé en 9h19 y este año tenía que volver a intentar hacer menos de 9 horas.

Este año, del grupo Pikados repetíamos David, Santi y yo. JuanVi pasaba ronda y se estrenaba Chema. Repetía por tercer año David Muñoz (enanito). Por otra parte Nuria e Iván también participaban esta edición. Cada uno tenía un objetivo, Santi y Chema el mismo que el mío, los Davides intentar bajar de 11h y Nuria e Iván que iban a ir juntos querían acabarla y si podía ser de día mucho mejor. Objetivos todos ambiciosos que a priori no permitían racaneos de ningún tipo.

También repetimos la casa rural de hace dos años y nos alojamos en El Palacio de Bracho a 4km de Cabezón. Viajamos el viernes por la tarde para recoger lo dorsales y poder estar el sábado a primera hora en la línea de salida.

Para el viaje nos dividimos según las zonas de residencia. Santi y Chema se van juntos por la A6, David y yo en mi coche por la A1 y David Muñoz él solo también por la A1 aunque algo mas tarde. Al llegar a Aranda de Duero nos desviamos por la CL-619 hasta Palencia, porque desde Aranda hasta Burgos hay obras y continuamente se reduce a un solo carril. Creo que acertamos con la elección. Antes de llegar a Palencia nos para la Guardia Civil en un control. Nos piden la documentación y nada más, asi que seguimos.

A las 8 de la tarde llegamos a Villanueva de la Peña, pueblo donde está ubicada la casa. Allí ya están Santi y Chema y sin perder tiempo nos vamos a Cabezón. De camino nos vuelve a parar la GC y ahora con la metralleta en mano. Joder, ¿pero qué pasa hoy?. Esta vez no nos piden nada y dejan continuar. Uff, y yo con los aminoácidos ramificados y el Supradyn Activo en la maleta.

Llegamos a Cabezón y comprobamos el ambientazo que hay. Nada que envidiar a la QH. Este año son casi 4.000 participantes y eso se nota. En la primera edición no pasaron de 500. Intento recoger el dorsal de David M, para ir ganando tiempo pero no me dejan. Antes de volver para la casa nos hacemos la foto de rigor.

Como novedad esta edición entre otras cosas, han entregado los dorsales personalizados. Además el mismo dorsal lleva el chip incorporado. Aunque conservo los de casi todas las marchas que hago, éste con más razón.

Esperamos a que llegue David M. y nos vamos a cenar. Jose nos ha preparado unos entremeses, ensaladas y revueltos como entrantes, macarrones con tomate de primero y lubina a la plancha de segundo. Menos mal que paramos ahí porque ya empezaba a sacar la carne. De postre, entre otras cosas, unas tartas de arroz con leche buenísimas. O sea que lo típico, hidratos y algo de proteínas, pero en abundancia. Hablando de hidratos, David M, nos sorprende con el menú que piensa llevarse en la camelback, bueno mejor dicho, en la super-mega-giga camelback, porque ahí cabe de todo. Pues el menú consistía en 5 o 6 sándwiches de jamón y otros tantos de leche, cacao, avellanas y azúcar, es decir Noo-cii-llaa. Un crack.

Mientras cenamos debatimos las estrategias a seguir durante la carrera pero sobre todo la de antes de la salida, es decir, a qué hora nos vamos para Cabezón, si lo hacemos en bici, en coche, desayunamos en el comedor o cada uno lo suyo en la habitación, etc, etc. Jose se ofrece estar a las 6.00 AM pero yo (que soy un poco testarudo) quiero estar a las 6.30 ya en la línea de salida y creo que empezando a desayunar a las 6h voy a ir justito, asi que decido desmarcarme del resto y desayunar en la habitación para ir posteriormente en coche hasta Cabezón. Santi, Chema y David, prefieren ir en bici, David (enanito) también en coche pero más tarde. Como veis, no hubo consenso.

Comparto habitación con David M. Pongo la alarma del móvil a las 5.35 am, preparo todo para perder el menor tiempo posible y me meto en la piltra. Son las 00h pero hasta la 00.45 creo que no me duermo. Visito el baño a mitad de noche sincronizado con David y a las 5.30 ya estoy despierto. Joder, que puntualidad, no hace falta ni despertador. David duerme plácidamente, asi que apago la alarma del móvil antes de que suene para no molestarle, pero con los preparativos del desayuno es imposible. Además, me doy cuenta que olvidé la leche de soja en casa. No, si ya sabía yo que se me olvidaba algo. ¿Y ahora qué hago? Me paso el dedo índice por la nariz como hacia Vicky el Vikingo y recuerdo que Chema me dijo que él iba a traer.

Son las seis menos cuarto asi que ya creo que estará despierto y le llamo al móvil, pero me da el mensaje de “número ocupado”. Coño, ¿a esas horas?. Me preocupo porque pienso que a lo mejor está hablando con Raquel ya que ayer su hijo tuvo que ir al hospital por un esguince en el pie. Afortunadamente, lo que pasó es que confundió la llamada mía con su despertador.

Y es que a esas horas no está uno muy consciente. Me devuelve la llamada y me presta medio litro de leche. Y ahora ya se porqué no rendí lo suficiente durante la carrera. Porque la leche era de Mercadona y claro yo soy mas de ViveSoy de Pascual. :-))

Termino mi desayuno y a las 6h15 me voy en coche a Cabezón. Santi ya está por el comedor buscando café pero allí no hay nadie asi que en cuanto bajan Chema y David cogen la bici y van dando pedales. Qué diferencia con el año pasado, cuando llegamos a las 7.30. Este año estoy allí a las 6.30 y he pillado sitio de preferencia. No obstante ya hay tres o cuatro filas de ciclistas que han madrugado más. Todavía no ha amanecido. Desde la cinta que nos han puesto hasta el arco de salida han dejado un cajón para la gente de Cabezón y algún invitado más que lo irá llenado según se acerca la hora. Entre todos ellos llegan a ser alrededor de 60 mas o menos.

¿Y qué hacemos durante una hora y media hasta que den la salida?. Pues hay de todo, gente que ha dejado al hijo de 13 años cuidando la bici mientras el desayuna tranquilo en el bar, otros dejan las bicis apoyada en los laterales o sujetas entre ellas para no tener que estar allí todo el rato, otros incluso se tumban y echan una cabezadita y los mas eruditos aprovechan para leer un rato.

  

Santi, Chema y David llegan a los 10 minutos y los veo 6 o 7 filas detrás, pero Santi se infiltra sibilinamente y llega a mi altura. David y Chema no se atrevieron ante alguna crítica que les cayó. Hicieron bien.

En la espera nos turnamos para ir al baño. La verdad es que no se me hizo larga esa hora y media. Al menos no hacia frio. Me encuentro por un lateral con Conchi y Miriam (las hermanas de Nuria) que van a hacer la marcha de los 45 km andando. Nos saludamos y deseamos suerte. Ellas salen al mismo tiempo que los ciclistas, compartiendo traca, acordes de AC/DC, pantalla gigante y megafonía, pero sin mezclarse con nosotros. Muy bien por la organización.

Faltan 15 minutos y por megafonía van contando los minutos que quedan para quemar la traca y dar la salida. Hago un repaso mental de la estrategia. No llevo camel, solo un bidón para ir rellenando en los avituallamientos, pero no en todos, no llevo chubasquero, me arriesgo a que no llueva, llevo equipación pikada pirata y manguitos. También la chaquetilla para la espera en la salida y para alguna bajada en caso de que baje la temperatura.

Llevo el track del 2010 para ir comparándolo. Tendría que sacarle más de 19 minutos para conseguir el objetivo. De comida me llevo 4 geles y 4 barritas, más que de sobra con los avituallamientos tan abundantes que hay durante la prueba. Pastillas Isostar y sobres Isopower para mezclar en el agua. El recorrido lo divido en dos partes, los primeros 65km con 1500 m de desnivel y cuatro subidas, cortas pero con los desniveles mas duros y una segunda parte que es la "mere dil le mouton" es decir "la madre del cordero", con 100km, los 3200m de desnivel restantes y otros cuatro puertacos, pero estos son largos, largos, muy largos. La clave es llegar a la cima del Moral1 (km 78) en menos de 4h15´ y a la cima del Moral2 (km 143) en menos de 8h15´. Si lo logro habré conseguido el objetivo.

Ni que decir tiene que quien llegue tocado al avituallamiento del km 65 no tiene nada que hacer. Hay que regularse para llegar con suficiente fuerza pero sin ir de paseo. En fin, que parece que tengo todo controlado. Las pulsaciones de momento contenidas, pero según se acerca la hora van aumentando. Última foto con la cámara antes de guardarla, ya que durante la marcha pocas o ninguna iba a hacer.

Llega el momento de tomar la salida. Empieza a sonar la música de AC/DC con su clásico Thunderstruck. Comienza la cuenta atrás desde los últimos 60 segundos. El ambiente en la salida es espectacular, la gente abarrota los alrededores, otros desde los balcones de sus casas, incluso subidos en algún árbol. Es impresionante.

El speaker anima a todo el mundo a ir descontando segundos. Se me pone la carne de gallina, joder, que salgamos ya, que me da algo. Comienza la traca y tras la humareda empezamos a movernos.

El ruido de calas y los pitidos del chip se suceden. Empieza la aventura y comienza el sufrimiento para conseguir el objetivo. Gracias a que hemos salido de los primeros no se producen apenas parones. Santi y yo tardamos escasos 15 segundos en pasar por el arco de meta. Chema y David unos 30 segundos. David M. tardó casi 5 minutos pero es que lo suyo si que fue de traca. Llego a la salida en coche y después de haber sacado la bici, cuando se va a poner las zapatillas se da cuenta que se le han olvidado en la casa rural. Me imagino la cara de circunstancias y el cabreo monumental. Asi que no le quedó más remedio que volver a por ellas. Luego, ya tuvo que quedarse por detrás, aunque tampoco perdió tanto tiempo porque los últimos pasaron por el arco de salida después de 18 minutos.

El tramo de carretera inicial hasta que nos adentramos en los caminos sirve para darse el primer calentón tratando de ganar todavía mas posiciones. La mayor parte de las bicicletas que veo en la salida son rígidas y las caras afiladas de sus dueños revelan que este año hay mucho gallo en el gallinero.

Enseguida nos desviamos por los caminos. Se rueda bastante rápido pero no hay problemas de tapones. He comprobado que el salir delante te hace ganar casi 10 minutos respecto a salir por la mitad como el año pasado. No tienes que aflojar el ritmo en ningún momento. A Santi le tengo unos 5 metros por delante y viajamos dentro del grupo cabecero, por delante se ve la moto que abre la carrera.

Subimos la primera dificultad del día, (Monte Corona, 3km al 6%) en grupo. Me extraña que por delante los gallos sigan aguantándose. Miro el pulsómetro y voy al 95%. Ufff, no se yo cuanto tiempo puedo mantener esto, se me empieza a hacer duro. Menos mal que empieza la bajada. Una bajada rápida y con gravilla, donde el año pasado hubo algún accidente importante. Los voluntarios lo recuerdan con sus indicaciones. Aflojo un poco y me descuelgo del grupo que se va estirando. A mitad de bajada me adelanta Merchan, del grupo Flandes, con una solvencia insultante y facilidad pasmosa mientras yo voy tensionado y sin confianza. Que se le va a hacer, las bajadas son mi kriptonita particular.

Por detrás me han alcanzado el grupo perseguidor y me uno a ellos para hacer la segunda subida (Ermita San Antonio, 2km 9%), algo más corta pero bastante dura. Santi ya se fue en la bajada y he perdido referencia visual. Llegamos a la cima e inmediatamente una pequeña bajada nos lleva al primer avituallamiento donde parece que nadie ha parado. Como tengo agua suficiente en el bidón, continúo, ahora por carretera que nos conducirá al pueblo de La Cocina donde empieza el espectáculo.

Miro el reloj y veo que queda un minuto para que se cumpla la primera hora de carrera. Voy alrededor de 8 minutos mejor que el año pasado, la cosa pinta bien. Comienza la tercera subida, El Soplao, con dos partes bien diferenciadas con un descanso entre ellas, la primera parte muy dura y técnica (2,5km al 11%) y la segunda más asequible (2km al 9%) . Nada más entrar en el cuestón empedrado, veo que va a ser imposible ni siquiera intentar subir montado, los de delante desmontan y yo les secundo. Veo a Santi casi arriba del todo, me debe sacar 3 o 4 cuatro minutos. La cantidad de gente que hay a los lados es increible. Parece el Tour de Flandes.

Vuelvo a montar en un pequeño descanso pero a los 100m vuelvo a echar pie a tierra. Mantener el equilibrio con la rueda delantera tocando la trasera del de delante me pone nervioso, asi que desisto. La segunda parte es mucho más llevadera. El terreno se hace un poco pesado, pero el ver las zetas que quedan por delante, ayuda bastante. Intento localizar a Santi pero no le veo. Sin embargo en una ligera mirada para atrás me parece ver a Chema un par de zetas más abajo. Uhmmm..., ¿será un espejismo?. Los últimos metros de la subida se enlazan por carretera para llegar al avituallamiento del Soplao.

Parada obligatoria, pocos corredores a estas horas pero muchos voluntarios. Apenas me bajo de la bici, me rellenan el bidón y me ayudan a echar las pastillas de Isostar. Hasta me pelan un plátano que me como allí mismo. Un verdadero lujo. No llego ni a dos minutos parado y comienzo la bajada. Es una bajada algo técnica con surcos y baches y algo de agua y barro, pero esta vez se me hace mas llevadera que otros años. Sin embargo me han pasado bajando más de 15 bikers. Finaliza la bajada con una zona de hormigón rayado y curvas cerradas que te llevan al pueblo de Celis, donde otros años la gente del pueblo sacaba las mangueras de sus casas para limpiar la bici. Este año y el pasado no han hecho falta.

Salimos a la carretera, pasamos Puentenansa y nos desviamos para cruzar el rio (agua no lleva, pero pedruscos, todos). Tuve que echar pie a tierra fiándome de uno de la organización, que solo decía, tramo de piedras, tenéis que desmontar, tenéis que desmontar,... Claro que no todo el mundo le hizo caso.

 A continuación nos dirigimos a la subida más dura de esta primera parte, el Monte AA (4,5km al 7,5%, pero con rampas de hasta el 22%). Comienza el puerto. A tirar de cadencia y de riñones. 

Las primeras rampas se me hacen duras y decido poner el molinillo. Voy jugando con los piñones. El haber salido tan fuerte y sin calentar me ha pasado algo de factura, asi que hay que controlar aquí no vaya a ser peor el remedio que la enfermedad. Paso las zonas hormigonadas aceptablemente bien y llego a un descansillo desde donde se ve toda la subida.

Bueno, pues ya casi hemos terminado la primera parte. Solo falta la bajada rápida, tramo por carretera y lo mejor de todo, el paso por el pueblo de Ruente. Si en la QH te emociona el paso por el Portalet, aquí el pasar por medio del pueblo y por el puente donde se amontona gente por todos los sitios es espectacular. Además tuve la suerte de ir encabezando un grupillo y pase el primero por el puente. Joder, que subidon de adrenalina. Creo que no se me olvidará nunca esa sensación.

Pasada la emoción viene la calma. Llaneo hasta el punto crucial de la carrera. Km 66. Avituallamiento de Casas del Monte. Es el avituallamiento más grande y hay de todo. Bocatas de jamón, de salchichón, bollitos, fruta, barritas, pinchos morunos, (bueno esto no pero casi) y además esta ubicado en un sitio ideal. Lugar amplio y con mucho verde donde poder incluso echarte una siesta.

Además al ser el avituallamiento principal tienen asistencia médica, masajes y asistencia técnica. No falta detalle. Otro diez más para la organización.

Claro que la mayoría suele parar para avituallarse en este punto pero siempre hay otros algo mas osados que prefieren otra forma de reponer fuerzas, aunque no creo que sea lo mas conveniente. Recuerdo que Jesus Peña lo pudo comprobar en una maratón MTB de Colmenar.

En mi caso solo lo usé para rellenar el bidón y comerme un plátano. Sigo y a un kilometro mas o menos paro para estirar las piernas y echar un pis. El primero y el único. Hace calor y ahora comienza lo bueno. El primero de los puertos largos es el Moral 1, casi 12 kilómetros al 8% de media. Una primera parte arbolada y con firme con asfalto roto y las segunda parte abierta con vistas preciosas del valle. Señores ha empezado el verdadero Soplao. Coincidimos en este tramo con muchos de los andarines que están haciendo los 45km a pie.

La subida no es dura pero hay que mantener un ritmo cómodo para no cebarse. Bloqueo las suspensiones como haría mas adelante en todas las subidas pisteras. Pocos me adelantan y tampoco yo adelanto a muchos. Se ve que cada uno está ya donde tiene que estar. Miro el reloj y veo con preocupación que el objetivo de estar en la cima en menos de 4h15´ va a ser difícil. Sin embargo le saco al virtual partner del año pasado casi 4km. Es el momento del primer gel. Espero que haga algo de efecto y enseguida acelero el ritmo. Ahora si paso a algunos. Si no consigo las 4h15´ por lo menos que me aproxime todo lo que pueda. También cuento con un pequeño margen que lo podría recuperar después. Llego a la zona del hombre del mazo, ah no, que es el hombre del cencerro. Vaya "moral" que tiene el tío. Todos los años igual. Está animando a todo el mundo haciendo sonar el cencerro desde al primero hasta el último, con frases como "Venga que esto es el Soplao, que no hemos venido de paseo". Y lo bueno es que a la vuelta, casi 5 horas después, allí sigue el tío. Que bárbaro!

Hay un primer alto, que al que no lo conoce le hace pupa, porque luego viene una bajadita y desde alli se divisa las rampas del último kilometro con desniveles cercanos al 9%. Voy mirando el reloj y me voy a pasar del tiempo previsto en 7 minutos. Llego con 4h22´ desde que salí. Ufff que justo voy a andar. Todo va a depender de lo que penalice el tramo nuevo. En la cima, paro a rellenar el bidón con las pastillas de Isostar y tiro para abajo. Aquí solo hay avituallamiento líquido. Llego a la carretera y giramos hacia Bárcena Mayor.

Coincido con uno de EnBici y le pregunto por Jesus (enanito). - ¿Jesus? me dice. - Si, Jesus Isidro, le digo yo. - Ah, te refieres a The Doctor. - Pues si, supongo. - Va por detras, - me dice -, no va bien. - Joder pues este año le he visto bien,- le digo yo - y en Colmenar estuvo genial.

Total que llegamos a Bárcena , donde está el avituallameinto y nos separamos. Al llevar agua suficiente, me basta con coger un platano para llevarme y aprovecho para tomarme una barrita. Esta foto es de Chema entrando en Barcena.

El año pasado me encontré a Santi en este avituallamiento, pero este año no hay rastro de él. Lo siguiente es subir el temido Cruz de Fuentes, 16km al 5% de media pero con los 5km finales al 8%. Subida tendida pero que puede pasar factura al mas pintao. Por momentos pienso, conociendo a Santi, que como las largas distancias siempre le pasan factura, me le puedo encontrar en cualquiera de las siguientes subidas, asi que de vez en cuando levanto la vista para identificar algún maillot pikado pero nada, que no aparece.

En la zona de descanso aprovecho para chutarme el segundo gel. Antes de llegar a la cima se empieza a preparar una buena tormenta, incluidos rayos, truenos y centallas. La verdad es que se agradece un poco pero por momentos la cosa se complica y llueve fuerte.

Llego a la cima, relleno de nuevo el bidón, esta vez con un sobre de Isopower de Powergym. Ahora comenzamos el nuevo tramo. Una bonita pista y senda a través de un bosque, que después de la lluvia favorece que me vaya salpicando barrillo a las gafas constantemente hasta el punto en que apenas veo nada. Además la pista no está exenta de dificultad pues la bajada final es extremadamente rápida y peligrosa, total que decido parar a limpiarme las gafas. Reanudo y en la última parte de la bajada no hago más que botar, no hay manera de controlar la bici. Menos mal que se acaba pronto.

Pero todo lo que baja sube y ahora quedan 6 kilómetros de subida de los que no tengo referencia. Llego al avituallamiento, reencontrándonos de nuevo con el recorrido original y veo con tristeza que todo lo que le sacaba al virtual partner me lo ha recortado. Asi que estimo que el nuevo tramo penaliza en unos 15 minutos respecto al recorrido del año pasado. En fin. Como en anteriores avituallamientos apenas me bajo de la bici, pido un plátano, (ya estoy aplatanado con tantos), y el hombre me ofrece un pastelito, le digo que no, pero al ver que lo ha traído se lo cojo y me lo como allí mismo. Ufff, mucho mejor que los geles, que bueno estaba. Me tenía que haber llevado otro. Pero, venga, tio, tira para adelante, que te estás entreteniendo, me digo a mi mismo. Falta la subida final a Venta Vieja, (3km al 5%) por una pista en buen estado. En estos momentos coincido con poca gente y después de llegar a la cima, hago la bajada prácticamente solo hasta llegar a la zona de Los Tojos con sus revueltas de asfalto donde alcanzo a uno. Que bonita bajada.

Cruce de carretera y empezamos la última subida (El Moral2, por donde hemos bajado antes). En el avituallamiento a pie de puerto ni siquiera paro, llevo agua suficiente y me como una barrita. Este es un punto peligroso porque todavía sigue bajando mucha gente y algunos adelantando se meten en mi carril.

Solo de pensar en los que los queda, me da algo, pero recuerdo que el primer año yo me encontré al primero casi al comienzo de la bajada. ¡Como cambian las cosas!.

No quiero ni mirar al reloj, para no desmoralizarme en caso de que vaya justo de tiempo, asi que continúo con un ritmo constante. Ya no se como colocarme en el sillín. Me duele todo el perineo. Adelanto a alguno que le ha pasado factura el kilometraje pero ninguno es Santi, ¡¡ sniff, sniff !!. A mitad del puerto me tomo el tercer gel y poco a poco van cayendo los kilómetros hasta llegar a la cima.

Ahora si, llega el momento de mirar el reloj, uffff, 8h22´. Tendría que hacer la bajada en 38´ y no me veo, a ver si la vamos a cagar, prefiero hacer 9h01´que tener una caída por la prisas. Casi con la toalla tirada, paro en el avituallamiento líquido, lleno el bidón con dos acuarius y me bebo otro del tirón. Joder, que sed tenia, había venido dosificando la bebida durante toda la subida. Pierdo casi tres minutos pero lo necesitaba. Enfilo la bajada y me engancho con uno que va de amarillo. Al salir a la carretera le digo que si nos damos relevos y casi sin esperar contestación nos ponemos a ello. Nos entendemos bien y vamos rápido en este tramo, incluso pasamos a algún grupo que intenta engancharse pero terminan desistiendo. Dos kilómetros para la meta, las piernas ya duelen, no veas cómo se agradecen los relevos, lo justo para recuperar un poco y volver a la carga. Llegamos a Cabezón, un pequeño atasco de coches nos hace parar y casi subirnos por la acera para llegar a las curvas que preceden a meta. Le digo a mi compi de bajada que entre él antes que le veía mas fuerte y asi entramos, primero él y luego yo.

Veo el reloj con 9h 07m, cachissss, bueno ya lo había asumido durante la bajada. He progresado adecuadamente pero necesito mejorar. Bueno, no importa, estoy contento. Le doy la mano a mi compañero y me voy hacia la carpa donde me encuentro con Santi y Merchan que ya están comiéndose la pasta.

Felicito a Santi por su tiempo y sin saber todavía detalles de la rotura del sillín en los últimos 15km. Si señor, me alegro por él. Esperamos allí a Chema que llega a la media hora más o menos. Nos dice que ha tenido momentos de flaqueza en la parte final del puerto pero en la bajada se ha recuperado y ha llegado bien. Habrá que repetir otro año.

Me encuentro con Josep, de la Cape Epic y de la Pedals Non-Stop. Vaya maquinón. Ha quedado el 53 con un tiempo de 8 horas. Media hora menos que el año pasado.

En la espera me he quedado algo frio y sugiero que vayamos a ducharnos para volver a la meta a recibir a los Davides que les quedaría una hora para llegar. Antes de eso unos pequeños estiramientos vienen bien.

Nos vamos a la casa rural, Santi y Chema en bici (en la mía, por el sillín) y yo en el coche. Nos duchamos y antes de salir recibimos la llamada de David. Ya ha llegado el jodio y no quería creérselo, ha hecho menos de 11h. Vamos a la carpa y allí le encontramos con una cara de felicidad que da envidia. Si ya se lo había dicho yo, si yo soy capaz de hacer menos de 9h tu haces menos de 11h fijo. Pues lo ha conseguido. Enhorabuena chavalote. El año que viene a bajar de las 10h y a disfrutar, por supuesto.

Vemos a Agus que acaba de llegar. Ha hecho también 11h. Le ha faltado un poco de entrenamiento de fondo para poder acabar más arriba. El año que viene Agus, a bajar de 10h. Veo también a Jesus (enanito, The Doctor), con cara de ultratumba. Quería haberse retirado pero gracias a David (enanito) que le ha cuidado, ha conseguido llegar. Animo Jesus, en el 2012 a superarse. Le pregunto por David y me dice que le ha visto pinchado a dos kilómetros de meta. Joder, que putada. Voy a ver si le veo entrar, para hacerle una foto, pero le veo en la acera hablando por teléfono.

Me cuenta el percance sufrido y la impotencia y la mala leche que te entra en una situación asi. Al final perdió casi 25 minutos con ese incidente, pero lo importante es lo que ya llevaba uno en las piernas. Otra espinita a sacarse el año que viene. ¡Pero que liante que soy!.

Ya solo falta que lleguen Nuria e Iván, les llamo por teléfono y me dice Iván que están a mitad de la subida del último puerto, que les queda algo menos de dos horas, pero que todo va bien y lo van a acabar sin problema. ¡Chapó por Nuria!. Les digo que no me quedo a esperarles porque nos vamos a cenar. Cuando llegan me llaman al móvil. Han hecho menos de 14 horas. Fenomenal por Nuria y también por Iván por acompañarla durante toda la marcha. Nuria, no te digo nada, el año que viene te veo haciendo menos de 12 horas.

Después de una cena por todo lo alto para recuperar y unos pacharanes para asentar, nos vamos a la cama, cansados pero contentos. He recopilado las clasificaciones de todos los conocidos:

El domingo nos levantamos a las 9h y vemos como el Orbayu se ha metido en Cabezón y llueve sin cesar. Que bonito. Menos mal que esto no fue ayer. Nos despedimos de Jose que nos ha tratado fenomenalmente y nos emplazamos para la siguiente.

Y colorín colorado este Soplao se ha acabado. Cualquier comentario que se os ocurra será bienvenido.

Un saludo
JL